El café de sus ojos

El momento imposible estaba cerca, los kilómetros restaban, un viaje único empezaba. Lágrimas de felicidad en vez de tristeza, su nombre es un sentido común, un nombre equivalente a un tatuaje, una marca permanente en mi corazón con la tinta de sus ojos. Un color jamás visto, una mirada profunda, reflejante, única, seductora.

Renace una calidez difícil de imaginar, un sentimiento perdido vuelve, momentos guardados en el tiempo. Un color, una historia, una vida, un abrazo, un beso, un todo lo que ella es. La luna es compañía, el frío desaparece en medio de su piel, caricias esperan, la presión se transforma en suavidad, cabellos cubren mis ojos, despertar es un problema.

Las fotografías reflejan casualidad, la luz cubre el paisaje, los caminos cada vez más largos, la sed es saciada con nuestro contacto, el bosque observa nuestras voces, palabras vuelan en el aire, letras conforman nuestras emociones.

Un adiós se acercaba, gestos inolvidables rellenan los últimos instantes. Los minutos son horas, una última mirada había muerto, la desesperación emerge. Salí corriendo en busca de ella, la encontré, di un abrazo, un beso, una caricia que llevaré hasta mi tumba.

Para una mujer muy especial… Lineth